En el marco de un diseño transversal, se encuestó a 78 veterinarias de Austria y Alemania mediante un test de autoinforme que evaluaba veinte estilos de afrontamiento diferentes. El análisis estadístico incluyó pruebas t de una muestra y la d de Cohen como medida concurrente del tamaño del efecto. Los resultados mostraron que las veterinarias son significativamente más propensas a utilizar estilos de afrontamiento negativos para su estrés, por ejemplo, la rumiación(t(74) = 6,733, p = < 0,001, d = 0,726) o el escapismo(t(72) = 2,173, p = 0,033, d = 0,281) en comparación con la población normal. Entre otros estudios, estos hallazgos contribuyen a un diagnóstico sistemático que es necesario para el desarrollo y la aplicación de intervenciones estandarizadas de gestión del estrés para la educación y formación veterinaria, por ejemplo, cursos para mejorar las habilidades de comunicación y gestión del estrés y supervisión o intervisión periódica (intercambio con compañeros profesionales). Debido a la estigmatización existente en relación con la salud mental, deberían ofrecerse servicios de asesoramiento de baja barrera para los veterinarios que ya se sienten estresados. Más información AQUÍ.
Afrontar los factores de estrés relacionados con el trabajo
Feminización y Estrés en la Profesión Veterinaria: Un Enfoque Diagnóstico Sistemático y Manejo Asociado
Dentro del campo de la medicina veterinaria, la distribución por sexos ha cambiado, ya que ahora la mayoría de los licenciados son mujeres. Los estudios demuestran que las veterinarias representan un grupo vulnerable al estrés y a las enfermedades relacionadas con el estrés. El objetivo del estudio era identificar los perfiles típicos de las estrategias de gestión del estrés y aclarar si las veterinarias están bien equipadas para hacer frente a los factores estresantes laborales.